miércoles, 10 de junio de 2009

TORMENTA DE VERANO


Aquí, ahora, allí perdida...intentando fijar la vista en otro lugar, con miles de piezas revueltas y desordenadas, amontonadas en el suelo.
Mientras se desgasta el lagrimal, mis pupilas se van volviendo mates y ...ni el intento que me encogía las entrañas, ni el haber soltado creencias que engullían oportunidades, ni la pasión nacida de esas concesiones ni el deseo que siento cuando te miro durante segundos evitan los tormentos que se apoderan de mi mente, las manos invisibles que han desmontado este puzzle...casi armado. Piezas que han estallado en mil pedazos y me han golpeado dejándome aturdida, disparándome hacia atrás en el tiempo y atándome a sensaciones ya olvidadas.

El pensamiento barato de no querer estar entre tus brazos, que me duele y me tortura, me abofetea en silencio vapuleándome, aunque no evita que cuestione si la inmensidad, si la plenitud es algo que encontraré en este camino. No, no puede ser que este malestar pueda presagiar más felicidad, no me creo que este pesar pueda invitarme a seguir caminando en la misma dirección...

Al llegar la calma, después de la explosión, surgen nuevas intenciones que se quedan atrapadas en bloqueos y viajan por el cuerpo en una montaña rusa que nunca para, fluctuando en el aquí, en el ahora..., el conflicto sigue existiendo sólo que con el botón en off la música no suena.

Sí!!...aquí y ahora necesito irme a mi refugio, deshacer el nudo de la garganta, de mi estómago, mañana será otro día y... con nuevas pupilas miraré la historia de nuevo.. sólo para que no se repita, para ver si hemos aprendido, para olvidar malos sentimientos y vivir intensamente todo lo que nos envuelve, lo que estamos creando.

Para alimentar ese amor que hoy está encogido y desembozarme la garganta de lágrimas atragantadas me despego un segundito...aunque te sigo queriendo tan cerca ... pero no creo que sufrir forme parte de mi camino. No así!!, deja que elija yo si quiero sufrir o no y no me pidas explicaciones por ello porqué yo tampoco entiendo los despliegues de furia, me hacen sentir pequeñita e impotente, tampoco entiendo que me pongan una mano en la boca y me tachen de insultante, sino puedo alzarme con mi voz lo haré con mi corazón, pero no ahora, ahora no.

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